sábado, 5 de mayo de 2012

365.- Especies en peligro de extinción: Las ballenas





Especies en peligro de extinción: Las ballenas

A finales de los años setenta los conocimientos sobre las ballenas eran aún muy pobres pero se suponía todo un mundo por descubrir.

En la actualidad el número de investigadores y técnicas de estudio se podría decir, metafóricamente hablando, que supera al número de ballenas existentes.

Misticetos o ballenas con barbas, carecen de dientes, en su lugar aparece a lo largo de toda la mandíbula un tejido laminado y córneo llamado barbas por que cuelga de cada lado de la mandíbula superior. Éstas filtran todo tipo de crustáceos, krill, peces pequeños y placton.

Las ballenas con barbas se clasifican principalmente en cuatro familias. La clasificación atiende a su distinto comportamiento, por que tienen similitudes entre las que pertenecen a la misma familia o por que tienen conexiones entre sus atributos y el medio en el que viven:
La ballena gris.
La ballena franca, franca austral y de Groenlandia.
La ballena pigmea
Y los rorcuales que a su vez alojan a las siguientes especies: AliblancoTropical o Brye, Norteño, Común, Ballena azul y Yubarta.
Los rorcuales comunes mantienen una coloración asimétrica en su cabeza, algo que los hace únicos entre todas las especies. El lado derecho de la cabeza es blanco y el lado izquierdo es del color del resto del cuerpo. La literatura y las leyendas atribuyen esta especial coloración a su estrategia para cazar y defenderse. La ciencia lo atribuye a la comunicación, si enseña el lado blanco, otros animales pueden ver cuan grande es y cuales podrían ser sus intenciones, si enseña el lado oscuro, puede acercarse más sin ser visto.

Las ballenas con barbas hacen alarde de un sin fin de técnicas de caza y aplican la más apropiada respecto al alimento a comer. Las yubartas crean un mundo de burbujas para concentrar el placton o a pequeños peces. En otras ocasiones se pasean entre los bancos de peces con su boca de par en par o son capaces de lanzar comida con su cola directa a la boca. Las ballenas de Groenlandia forman una V perfecta compuesta hasta de 14 individuos nadando con la boca abierta generando unas paredes dónde quedan atrapadas las presas.

Los rorcuales aliblancos filtran toneladas de Krill (pequeños crustáceos), tragan arenques o sorben las huevas depositadas en las algas. Las ballenas grises comen en el fondo del mar al presionar arrastrando uno de sus lados por el fondo marino y filtrando todo el contenido.

Las ballenas son capaces de recorrer más e 6000 kilómetros de distancia para llegar a aguas árticas en la primavera o el verano en busca de su alimento favorito. Llegan hasta lagunas tranquilas dónde pasta el krill y en un baile de burbujas engullen entre 40 y 50 toneladas de agua para filtrar el alimento deseado. El krill constituye la mayor parte de su dieta. Uno de los espectáculos más brillantes del mundo animal es el de redes de burbujas de las yubartas. Ha sido descrito como red de burbujas por su similitud a una red de cerco, la diferencia radica en que la ballena construye su red desde abajo hacia arriba y el fondo de la misma, es su dilatada boca filtradora de mar.

Las ballenas azules, las yubartas y otros rorculaes disponen de numerosos pliegues en la garganta que le proporcionan la posibilidad de abrir exageradamente su mandíbula para poder tragar más agua con toda la variedad de alimento que eso puede suponer: peces, placton, crustáceos, etc. Por el contrario las ballenas francas sólo se alimentan de placton, nadan en la superficie con la boca abierta filtrando todo lo que no sean especies planctónicas de copépodos.

Se dice que las ballenas son el reflejo de la biosfera. Viven en un medio fluido, siempre cambiante y se ven obligadas a cambiar con la misma rapidez sus pautas de vida.
Las migraciones de las ballenas se deben principalmente a la cría de ballenatos en aguas más cálidas y tranquilas. Una vez nacidas las crías recorrerán con ellas miles de kilómetros en busca del preciado krill ártico. Las yubartas macho cuando están en zonas de reproducción adoptan dos pautas, o la lucha o el canto, es decir, o cantan y cantan hasta que paran súbitamente o dejan de hacerlo para unirse a grupos de apareamiento participando en concursos competitivos interactuando con otros machos. Pelean entre ellos para conseguir la posición más estratégica. Aletazos, coletazos, embestidas y atroces colisiones dejan saldos de enormes heridas y sangrientos combates, mientras la hembra no deja de nadar en un amplio recorrido para atraer a cuantos más machos mejor.

¿Pero para que entonces cantar? ¿Por qué cantan los machos? En ocasiones se ha sugerido que el macho cantaba para atraer a la hembra, pero son ya muchas las ocasiones en que se ha visto el acercamiento entre machos y no hembras. Cuando dos machos se acercan dejan de cantar y cuando se alejan empiezan a hacerlo, parece cuando menos una comunicación. No todos los investigadores aceptan ésta hipótesis, pero es la más extendida: se cree que el canto es la indicación de la fuerza y el tamaño e incluso el estado físico del animal.

Las ballenas azules y las yubartas mantienen un comportamiento casi fiel en su apareamiento, pues en caso de aparecer un tercer individuo es echado inmediatamente. Aún hoy en día no se sabe con certeza, como se reproducen éstas especies. No ocurre lo mismo con las ballenas francas, donde la competición por el esperma es primordial. Tras una competición entre machos el copulante se determina por su vigorosidad, su fortaleza y el volumen de su esperma como por el orden en que es introducido en la hembra. Ésta atrae a todos los machos disponibles. La hembra pone muy difícil el apareamiento, se gira sobre su espalda dando aletazos, giros bruscos, empuja a los machos y emite fuertes gruñidos llamando a otros machos. El más fuerte, el más rápido el mejor entrenado será capaz de conseguir el apareamiento con la hembra franca, que más de un año después parirá a unan sola cría. Los lazos entre madre e hija son tan fuertes que les hacen permanecer juntas incluso hasta seis años después del nacimiento. La Comisión Ballenera Internacional (CBI) nació en 1946 para garantizar la vida de las ballenas y para controlar la industria ballenera, dado que las poblaciones de ballenas habían descendido alarmantemente en todo el mundo por la presión del hombre.

Fue en 1982 cuando la CBI, lanza la primera moratoria internacional sobre la caza indiscriminada de ballenas, puesto que el descenso continuaba estrepitosamente. A pesar de ello, Japón decide iniciar al margen de la CBI, su propia investigación para defender su caza comercial de ballenas y Noruega se lanza a la caza y captura a pesar de la moratoria, seguida por Islandia que anunciaba la caza de unos 500 ejemplares en aras de la investigación.

En 2003 se crea un Comité de Conservación para fortalecer la protección a los cetáceos, y el trabajo de la CBI, Desde entonces los países antes mencionados, no han hecho otra cosa que intentar debilitar el Comité de una u otra forma, para poder explotar a las ballenas en su beneficio económico.

Es evidente que el impacto de la acción humana sobre los cetáceos es completamente destructivo, pero lamentablemente las ballenas tienen que enfrentarse a otros ataques también provocados por el hombre: El cambio climático, la contaminación de los océanos, tanto química como acústicamente, la perdida de hábitats y alimento debido a la sobrepesca, la disminución paulatina de la capa de ozono o las capturas accidentales son, entre otras, las cusas que están haciendo desaparecer a los grandes cetáceos de nuestros mares.

Si los países adoptaran medidas urgentes para la protección de nuestros océanos, tal vez pudieran salvarse de su inminente extinción. Pero señores, si casi, casi, han sido incapaces de ponerse de acuerdo con la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, algo que nos afecta directamente a nosotros, cómo van a preocuparse por unas cuantas ballenas a las que, ciertos países, ven como dinero flotando en el mar.


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